Un año más, el Colegio San Miguel hizo su particular fiesta–homenaje a los alumnos que recibían en días posteriores su 1ª Comunión.
Este año, un único alumno fue el centro de atención de todas las miradas, pero estuvo muy bien acompañado por todos sus compañeros, profesores y los familiares que acudieron al acto en un día tan especial.
Tras el intercambio de regalos, el hermano Faustino, le dedicó unas palabras que seguro calaron muy hondo en su corazón.
El acto finalizó con un pequeño aperitivo para todos.